Hay preocupación en el sector inmobiliario por la escasa cantidad de operaciones concretadas la primera mitad de mes. Aun bajando los precios iniciales muchas unidades quedaron sin ocuparse
MIRAMAR (Corresponsal)
Si bien Miramar cuenta con una aceptable cantidad de público lo que va de enero, la temporada viene pegando ciertos cachetazos a sectores claves, especialmente al inmobiliario donde al día de hoy existe un 50% de disponibilidad en departamentos, según datos oficiales brindados por integrantes del Colegio de Martilleros a LA CAPITAL.
Muchas unidades situadas frente al mar y sobre las cuadras siguientes que generalmente tenían una importante ocupación la primera quincena de enero están vacías, producto de algunos valores excesivos impuestos al momento de activación inicial del mercado allá por agosto, septiembre y octubre.
“La gente consultó en esa época y muchos ya habían impuesto un 30% de aumento algo que nos parecía excesivo, un 10 o 15% hubiese sido lo correcto ya que en esos casos pudieron alquilar. Hubo clientes que se perdieron o eligieron otro destino y no llamaron más para consultar. Hay propietarios que venían y este año decidieron poner sus unidades en alquiler pero se encontraron con una temporada cortada y la economía actual tampoco ayuda”, dijo Gastón Caraballo, uno de los martilleros consultados a LA CAPITAL.
“No fue acertado el incremento, más si veníamos de una temporada mala el año pasado. La inflación nunca va a aparejada a un valor de alquiler, la propiedad sigue siendo misma y no puede en tres años llegar al 100% de lo que vale el alquiler”, agregó.
“Se esperaban un panorama así porque lo palpábamos desde 60 días atrás, pero no perdemos la esperanza que los cortes cada cinco o siete días nos sumen”, recalcó Caraballo.
Actualmente, existen mono ambientes cómodos para dos o tres personas de 700 u 800 pesos por día. Hay otros casos en el radio céntrico y a pocos metros de la costa, con dos dormitorios, que no se pueden cerrarse en 1000 pesos, pero según mencionaron profesionales del rubro, “en principio el valor era de 1500 o 1600 pesos y ahora es tarde, por más que se baje la tarifa no hay demanda”.
Contexto económico
Todos coinciden que más allá de los valores, el contexto general del país no ayuda. “Estamos esperando que comience la temporada”, sostuvo irónicamente otra de las fuentes consultadas.
“En Argentina todo es muy caro, por eso hubo una estampida hacia Brasil y también a Chile, donde en este último caso la gente se come 10 horas de cola en la aduana para comprar a mitad de precio. Paraguay y Bolivia también están más baratos y por eso muchos cruzan la frontera, adquieren lo que necesitan y vuelven”, amplió.
La situación es similar o aún más evidente en casas y chalets ya que se observan muchos carteles de alquiler, sobre todo en barrios característicos cerca de la playa y el centro de la ciudad.
“Tengo cinco dúplex sobre avenida 9 que el año pasado estaban completos, ahora hay sólo dos ocupados”, dijo otro operador a este matutino.
Lo que viene
Esta temporada se viene caracterizando por la llegada de turismo “con valijas en mano”, a sabiendas de la disponibilidad de plazas para alojarse y por eso algunos tienen la esperanza de culminar la primera mitad de mes con un 10 o 15% más de ocupación.
Para la segunda quincena se evidencia un repunte en los alquileres donde se espera llegar en el balance general, al menos al 70% de cobertura. “Hay una activación después del 15 de enero, algo que ya es histórico con reservas ya realizadas. La prestación en su mayoría es buena, desde el anteaño pasado hubo mejoras en los servicios”, destacó Caraballo.
En la modalidad de estadías cortas y recambios, generalmente se ven beneficiados con mayor afluencia los aparts, ciertos hoteles y cabañas que cuentan con otros servicios incluidos para el turista. Dentro de la oferta se observan promociones especiales que en casos incluyen la sombra en balnearios, otro de los sectores comerciales que se ven afectados por esta recesión económica.